En cuanto a la renovación natural del aire de los locales, se realiza a través de las diversas aberturas que posean: puertas, ventanas, lucernas, chimeneas, juntas de los cerramientos, fisuras, etc. La circulación del aire se produce por diferencias térmicas y de presión, que pueden ser de origen natural, tales como las debidas a la diferente insolación de las paredes o a la acción del viento, o bien resultan de los procesos industriales (por transferencia de calor o por efecto mecánico).
Si bien la ventilación natural es en parte incontrolable, por estar sujeta a variaciones climáticas imprevisibles, por ejemplo el viento, tiene numerosas aplicaciones en la ventilación de locales industriales, particularmente cuando existen fuentes de calor. Tales son los casos de las industrias siderúrgicas y del vidrio, salas de calderas, centrales térmicas, etc.
El calor transferido al ambiente por los procesos industriales no sólo es un factor importante a tener en cuenta en la determinación de la ventilación necesaria, sino que también es energía disponible para producir esa misma ventilación, y por ello es conveniente considerar los siguientes casos típicos:
- Ventilación de áreas con procesos fríos.
- Ventilación de áreas con fuentes de calor.
La ventilación general requerida por las áreas frías que no tienen fuentes contaminantes es mínima. Son suficientes las aberturas habitualmente existentes y las fugas, para asegurar la renovación del aire. En invierno puede ser necesaria la calefacción y en verano debe reducirse al mínimo la radiación solar incidente.
Por el contrario, cuando en las áreas frías hay fuentes de contaminación es imprescindible la ventilación mecánica. Esta puede ser general o localizada; esta ultima es la más frecuentemente utilizada.
En las áreas con fuentes de calor tiene aplicación tanto la ventilación natural como la mecánica.
La ventilación natural puede ser general o localizada. Este último caso se presenta en la evacuación de gases calientes, como los gases de combustión, mediante campanas suspendidas o chimeneas.
La ventilación mecánica general puede hacerse mediante extractores o inyectores de aire, sin usar conductos o bien con sistemas de conductos de aspiración o de distribución.
La extracción localizada de contaminantes en procesos fríos requiere siempre ventilación mecánica. |